viernes, 23 de enero de 2009

ANA Y YO VIAJAMOS EN UNA MOTO

***
Ana y yo fuimos al super. Ahora estamos saliendo del estacionamiento. Nos encontramos dentro de un coche. Yo manejo, sin saber bien cómo hacerlo. De pronto acelero. Estoy a punto de atropellar a unas personas, pero freno justo a tiempo, es decir, a penas toco a una niña morena, de cabello corto y ondulado, quien por cierto lleva puesto un vestido azul.
***
Conduzco una moto. Ana va en la parte de atrás, lleva puesta una boina y me abraza mientras acelero; esta escena me recuerda mucho el final de Amelie. No estamos en una calle, sino en una especie de plaza grande, rodeada por edificios coloniales y vacía de gente, de tal modo que puedo conducir con libertad. El cielo es rosa. El piso está cubierto con adoquines. Y cientos de palomas se elevan hacia el cielo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

El azar me ha conducido a tu blog.
Y resulta que coincidimos en su diseño.
He entrado varias veces y te he leído.
Me parece muy original el relatar sueños.¿Quizás falte un intento de interpretarlos?
También son geniales las ilustraciones.
Te felicito.
Manuel

Mario dijo...

thelma y louise necesitan la ruta 66, pero el fabuloso destino de los amores a la europea, viaja en motoneta.

Powered By Blogger

Datos personales

Mi foto
Con mi baja estatura pierdo glamour, pero gano simpatía. Me alegro con facilidad: "sí, sí, sí, yo quiero mambo, mambo". Soy una persona agridulce. Me gusta el mar y cualquier agua clara o verdeazul en la que pueda zambullirme. Mi escritor favorito es Italo Calvino, de quien aprendí que, en medio de la mezquindad, un impulso de amor general puede originar un universo.